Los ángeles también comen judías

 Los que sean aficionados al basket y además tengan ya unos añitos seguro que recordarán aquella frase que decía el periodista Ramón Trecet cuando algún jugador fallaba una canasta fácil... "Los ángeles también comen judías". Esto aplica tanto al baloncesto como a la colombofilia y como ejemplo les pongo a continuación una "cagada curiosa" de los míticos hermanos Brugemann (la cuentan ellos mismos en su página web)

"La suelta de Barcelona no se nos dio bien. La primera paloma que llegó a casa dio unas diez vueltas sobre el palomar y luego voló hacia el viejo palomar en Dorpsstraat (N del T: Hacía seis meses que los Brugemann se había cambiando a un nuevo palomar), donde había estado volando hasta pocos meses antes. La esposa de Jos, Colinda, condujo hasta el viejo palomar lo más rápido que pudo para intentar ahuyentarla, pero cuando llegó allí no se veía ninguna paloma. En ese momento, la paloma volvía a dar vueltas sobre el nuevo palomar. Esto continuó y continuó. Llegó otra paloma y después de dudar un buen rato, finalmente entró en el palomar. Mientras tanto, Kees había vuelto una vez más al palomar viejo y encontró otra paloma de Barcelona en el palomar vacío. Menudo desastre competir con palomas que aún no están acostumbradas a su nuevo alojamiento. Al final, logramos ganar nueve premios nacionales de las 19 palomas nominadas. En casi todas las demás carreras, los resultados fueron terribles. Era como si las palomas ya no supieran a dónde pertenecían, para nosotros fue una tragedia."



Comentarios